domingo, 29 de julio de 2012

Desde la ventana de una cafetería


Anclado, en las aguas turbias de un café,
permanece mi corazón atolondrado.
Varado, en una calle sombría, está mi encanto.
                                                                          
El silencio brota de mis poros
contamina la atmósfera, 
el tacto, 
los colores,
a ras del suelo, respirando polvo añejo,
el dolor se fortalece después de haber caído.

Olvidadas, en la bandeja de mi espíritu,
surcan lágrimas sobre mis mejillas.
Encerradas, en el abismo del parpadeo,
las pestañas trémulas piden descanso.

Me secuestraron el ánimo,
no hay pena mas grande,
a escala de grises mis ojos perciben,
tengo pesadillas despierto.

Desde la ventana de una cafetería
el mundo más chico se me hace
y la crepa de fresa, en el campo de guerra,
se bate a muerte contra mis fantasmas.




12 comentarios:

  1. Que belleza tan grande emana desde la ventana de esa cafetería, aún a pesar de secuestrar el ánimo.

    Saludos

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  2. Que intensidad romu!
    Un abrazo!

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  3. felicidades!!! personalmente me llegó profundamente,,,saludos

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  4. Trás un cristal... la calle,
    Tú continuas al otro lado anotando las palabras que atrapas para ser domesticadas, buscas que su belleza aletee sobre nuestra ávida curiosidad.

    Eres un artista Romu

    Saludos almendrados ;)

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  5. En las cafeterías tienen lugar historias de lo más fascinantes. Como esta, por ejemplo.

    Un beso.

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  6. No permitas que vuelvan a secuestrar tu ánimo, Romu.
    Siempre habrá un motivo para sonreír y mirar la vida con optimismo, pase lo que pase.

    Gracias por dejarme palabras tan bonitas en mi blog.

    Besitos, abrazos y aletos de mi corazón al tuyo!!!

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  7. Que vuelva ese ánimo poeta porque en él va tu escencia.
    Que bueno poder leerte un ´poco más seguido Omar, en buena hora.
    un abrazo

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  8. Si, los cafés se vuelven agua turbia, las fresas se vuelven combativas e insulsas, las lágrimas se cansan de resbalar mejillas y todo parece desplobado.
    El ánimo nos lo roban a diario y en cada amanecer nos recargamos para subsistir a un día más rozándonos con fantasmas.
    Pero acaba pasando.
    Si, nada más que eso.

    Besos Romu, lo has dicho muy hermoso

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  9. Entre brumas viaja tu pensamiento en este bello poema, Romu, pero es que las brumas son infieles y huyen hacia otros lares; es entonces cuando la claridad nos permite ver la luz

    Un saludo cordial

    FINA

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  10. Bonito,muy bonito,
    Saludos desde mi rinconcito..!

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